Nunca me de trabajo por la mañana. Espere hasta las 15 hs. y entonces tráigalo todo. El desafío de una hora límite es estimulante.
Si realmente es un "trabajo urgente" corra y interrúmpame cada 10 minutos para preguntar como va. Eso ayuda.
Si mis brazos estan llenos de papeles, cajas libros o material, no me abra la puerta. Tengo que aprender a funcionar como un parapléjico y abrir puertas es un buen entrenamiento.
Si me da más de un trabajo para hacer, no me diga cual es el prioritario. Déjeme adivinarlo.
Haga todo lo posible para que me quede hasta tarde. Me gusta la oficina y realmente no tengo ningún otro sitio a donde ir ni nada mejor que hacer.
Si un trabajo que hago le gusta, manténgalo en secreto. Revelaciones como esa me pueden costar un ascenso.
Si tiene instrucciones especiales para un trabajo, no las ponga por escrito. De hecho, guardeselas hasta que el trabajo este casi terminado.
Nunca me presente a la gente con la que esta. Cuando usted se refiera a ellas más tarde, mis complejas deducciones las identificaran.
Cuenteme todos sus pequeños problemas. No hay nadie que los tenga y es tan agradable saber que hay alguien menos afortunado...
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
2 comentarios:
Tu jefe se peina la barba con un peinecito que lleva en el bolsillo trasero del pantalón. Eso es todo lo que tengo para decir.
yo tengo una para vos: tambien es tu jefe.jajajjajajajaa
Publicar un comentario